viernes, 5 de marzo de 2010

Hoy

Llevo días necesitando las letras para decir tantas cosas, para poner en algún lugar el remolino que me lleva del cielo al infierno en dos segundos. He pensando en lo mucho que te quiero, en realidad he pensando en que te amo, que te he amado tanto tiempo... y que no me animo a decir que aun es presente porque admitirlo es dolerme en la realidad de que jamás has de volver, de que esa que yo veo hoy no es la misma cuando está a mi lado. Quisiera haber podido motivar un amor decidido, y hoy no me queda más que respirar profundo cuando las lágrimas se quienren asomar al pensar que deseo tanto que estés a mi lado y no te encuentras y no volverás... sigo convenciendome de que no me amas, pues hace muchos años decidí que cuando es amor, se lucha y todo se hace posible. Si congelo mi corazón este puede ver que todo sigue igual, que no hay locura, esa locura hermosa que transforma las estrellas en luciernagas y te hace querer darle la vuelta al mundo sólo por un abrazo, por una mirada, por una sonrisa, por el más marvilloso de los besos, ese que sólo se encuentra en esa boca. Hoy me encuentro perdido y como siempre, con una malvada y cruel esperanza de que un día me digas que es amor, ese amor que está en el cuerpo entero, ese que no se piensa, que se siente y es imposible negarlo, ese que te motiva a las más nobles acciones y pensamientos, ese que reconoce la belleza de quien se ama a partir de la propia belleza... y respiro profundo para pensar en otra cosa y tratar de no dedicarte ninguna canción.

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